Muy buenas... paso por estos lados a quejarme de Distribuidora Los Coches de la Sabana y de mi paciencia y educación... de paso
Les cuento, compre en agosto de 2014 con ellos una camioneta Kia Sorento TDI 2009 con 88.000 km, ¿por qué? pues en los coches habíamos comprado varios carros (nuevos) anteriormente y sin problemas, necesitaba un carro de esas características sin que fuera de un valor muy alto y no fuera muy llamativo, entonces como primera opción fui a los coches donde me ofrecieron esta camioneta, al informarles de mis necesidades de un vehículo diesel para viajar y trabajar, pero no estaba interesado en otra camioneta doble cabina (ya tenía una en la empresa, la idea era dejar esta para los temas de la empresa y la sorento para mis desplazamientos por comodidad y seguridad) me ofrecieron la sorento argumentando que estaba en perfecto estado, que con garantía, que como éramos clientes, ques, ques y ques, como tenía una buena experiencia previa, hice el negocio, claro que no rebajaron un peso.
Desde el día de la entrega, vi que botaba humo negro, pero al ser diesel no le preste mayor atención, dos días después de la entrega viaje de Bogotá a Sogamoso y aunque el carro no presentó problemas de dejarme tirado, parecía una locomotora victoriana a velocidades de crucero en esta carretera, al regresar dos días después, salí con mi esposa a la zona de los restaurantes de la vía a la Calera y me toco dejar la camioneta atravesada en un estacionamiento porque ni de frente ni en reversa quiso subir una lomita en la entrada, se quedaba quieta y nuevamente humo cual locomotora.
Al otro día (siete días después de la entrega) al salir del estacionamiento del conjunto, me toco engranar "el bajo" para poder salir hacía los coches para hablar con el departamento de usados y atención al cliente. Una vez en el concesionario, me dijeron que la trajera al otro día para revisarla, lo cual hice, en esa ocasión me informaron inicialmente que en tres días y aquí inició mi largo calvario.
Antes unas precisiones: todos los repuestos y mano de obra las asumió los coches, del cual de Dpto de taller no tengo queja por su atención y buena disposición, pero sí, por no hacer una adecuada reparación del vehículo. De usados, servicio al cliente y jurídica, si es lo peor que he visto.
Primera entrada al taller de los coches: tres meses (inicialmente tres días se me informó), después de los cuales me informaron que se había hecho una reparación de motor, incluyendo cambio de la ECU, que tenía un problema, durante este tiempo se me suministro por parte de usados un vehículo de reemplazo, que no tenía las mismas características del que había adquirido.
A los 15 días de la entrega, en la Vaca que ríe pare a comprar los obligatorios postres y deje el carro encendido (como se hace normalmente con un carro turbo-diesel) y también porque la abuela de mi esposa y ella no quisieron bajar, a los tres minutos mi esposa entró con la abuela, alarmada que el carro se estaba incendiando, obviamente salí a ver y era vapor de agua, el radiador se había explotado literalmente, durante el recorrido desde Girardot no se había presentado ningún signo de aumento de temperatura o testigo de lo mismo, obviamente grúa, carro del seguro para regresar y claro esperar un buen rato.
Segundo ingreso al taller de los coches: 15 días, sin carro de reemplazo, se cambió el radiador por uno genérico y se revisó el sistema de refrigeración.
Entrega casi para navidad, para finales de diciembre de 2014 habíamos planeado con mi esposa un viaje por carretera a Cartagena, Barranquilla y Santa Marta, de regreso unos kilómetros pasando el desvío para Puerto Berrio, la temperatura aumenta, por lo que me detuve en la berma y llamé inicialmente el carro taller de la concesión, pues era el puente de reyes y el seguro sería más demorado, diagnostico, una manguera fisurada, al bajar la temperatura y reponer el agua (no le habían puesto refrigerante en Los Coches) fui a Berrio donde se quitó la parte dañada de la manguera (que era un extremo de entrada al alojamiento del termostato) y retorne al camino, llegué a Bogotá no sin tener que hacer tres paradas más por el camino pues se subía la temperatura después de cierto tiempo, aunque nunca noté otra fuga, debía reponer los niveles del agua (el seguro me informó que la grúa podía tardar más de 5 horas en llegar)
Tercera entrada al taller de los coches: una semana, en la que supuestamente se cambió la manguera dañada y se revisó nuevamente el sistema de refrigeración, esta vez sí pusieron refrigerante.
Para no alagarme mucho más con taller, después de esta entrada en el 2015 el carro entró al taller de los coches por los mismos problemas más de 5 veces, con duraciones de entre quince a dos meses cada una, en estas entradas se cambió radiador por el original del carro, además en septiembre del 2015 se cambió la culata, pues según se me informó el sistema tenía fuga de refrigerante por este punto.
Dos semanas después de la entrega del cambio de la culata, regresando de Manizales, en el alto del vino el carro empezó a botar humo en el habitáculo del motor y olor a diésel, grúa por enésima vez, después de informar a los coches y ya con la mayor desconfianza, fui a un taller diésel especializado (donde tienen banco de prueba de bombas de inyección, inyectores, además de estar certificados por Bosch para sistemas de inyección diésel) diagnostico, no había montado bien los inyectores, dos no tenían los sellos, por lo que al aumentar la presión el diésel salía al tapa válvulas, como era una intervención de 2 horas, se bajaron los inyectores mal instalados y se pusieron los sellos, sin problemas, hasta qué…
45 días después de la entrega del cambio de la culata (el mayor tiempo que duro el carro fuera del taller), en diciembre de 2015, en la vía a Guaimaral, se encendió el testigo del aceite, por lo me detuve en cuanto pude orillarme, y nuevamente grúa al taller diésel donde se instalaron los sellos de los inyectores, para solicitar un peritaje.
Se encontró que el tensor de la cadena de repartición se había quedado sin presión, además de limadura en el habitáculo de la cadena, que fue lo inicialmente se inspeccionó, a lo que se sumó presencia de aceite en el múltiple de entrada, así que nuevamente a los coches, donde después de un mes aceptaron revisar de nuevo la camioneta, y desde el pasado 14 de enero de 2016 está en el taller.
Ahora usados y servicio al cliente, en junio del 2015, el dpto. de taller en reunión en la cual yo estuve presente, y cuando se estaba estudiando el cambio del radiador por el original de fábrica, le recomendó a usados el cambio de vehículo, y esta es la otra parte de la historia.
El gerente de usados (que para esta época era una persona diferente al gerente de usado que inicialmente me vendió el vehículo y trámito la garantía de reparación, además de proporcionarme vehículos de reemplazo), me ofreció una retoma de la sorento 8 millones por debajo del valor que yo había pagado. Ante lo cual decidí esperar a que el carro fuera reparado en esa ocasión y ya ni carro de reemplazo.
En septiembre de 2015, durante el cambio de la culata, solicité nuevamente el cambio de vehículo, porque se me había informado que no había más opciones y la respuesta fue la misma, que claro, que ya sabía la propuesta de negocio.
Por el lado de servicio al cliente, ahora ya ni tengo acceso a información directa de taller, solo por servicio al cliente y el martes pasado que llame para saber del carro, la señora de servicio al cliente me dice que no tiene tiempo para hablar con taller y cuando pueda, me llama y aquí estoy sentado esperando....
Ahora, ya mi paciencia finalizó y voy a solicitar devolución del dinero, (pues ya estoy en la compra de una Ford Escape semi-nueva mod 2015 de un conocido heeeee), solicitando el acompañamiento de la SIC, ya que tengo correos, informes escritos de reparaciones y entradas a taller.
Ahora, disculpen lo largo y eso que resumí lo más posible.
Por último, no confíen en que comprando en concesionario reconocido se salvan de los problemas, pues en una ocasión con uno de los vehículos de reemplazo me dejo tirado por que la caja automática saco la mano a la hora se retirarlo del concesionario.