Experiencias con un Lumia 520.
Advierto que está como largo el análisis, así que quienes no estén interesados en este modelo, podrían pasar a la página siguiente
El Lumia 520 es un equipo que me hizo recordar las grandes virtudes de esta marca en cuanto a la robustez de sus máquinas. A simple tacto, el equipo se siente fuerte y resistente. Tuve por un año un Samsung Galaxy Chat y quise migrar a Windows 8 por volver a revivir esa agradable sensación que antes se tenía a la hora de estrenar celular. Y aunque para muchos esto sea irrelevante, en lo personal extrañaba ese primer día de "cacharrear" nuevos menús y funciones, ver una nueva interface gráfica y otras pendejadas que implicaba el cambio.
El Windows 8 anda muy fluido en el 520, por lo que su RAM de menor capacidad se siente mejor aprovechada que con android. Aunque muchos podrían argumentar que W8 está muy limitada en aplicaciones a descargar, me parece que a disposición está lo más relevante y necesario para el uso de la mayoría. No nos digamos mentiras, las millones de apps de Android resultan inútiles o riesgosas. A excepción del BBM que aún no está para W8, lo demás se consigue y funciona de maravilla. (Accuweather / TuneInRadio / Whatsapp / FB / YouTube / Twitter / Line).
La cámara me parece excepcional y cuenta con un uso intuitivo en donde es posible establecer un punto de enfoque con sólo tocar la pantalla. Carece de cámara frontal, aspecto que no dista mucho de los equipos de su mismo rango.
La duración de batería fue la razón principal que me impulsó a renovar el celular. Mientras que con Android me quejaba de que su batería era impredecible (a veces llegaba al 30% y fuácate, se bajaba de una hasta morir), acá dura lo que tiene que durar según el uso. El WiFi es lo más goloso, al igual que ciertos juegos que suben la temperatura del equipo y acortan la autonomía. Con uso mixto entre llamadas de 1 hora en promedio, uso de Wifi similar, reproducción de música y otras funciones, me ha durado dos días continuos. Si abuso del Wi Fi, he podido navegar 4 horas de seguido, viendo videos, facebook y llamando al tiempo antes de que se agote la pila.
Es necesario crear una cuenta en outlook o msn para enganchar el celular a los servicios de la nube (tienda de apps, cuentas, etc). Yo cree una nueva para evitar la fatiga de ver en el directorio a cientos de contactos que ya ni recordaba que tenía en msn. Una vez creada la cuenta, el Lumia logra que esta información de nuestra agenda telefónica, programación del calendario, documentos y otras vainas queden subidas en Internet y podamos acceder desde cualquier computador o dispositivo. Para tener en cuenta, el Lumia no permite guardar nuevos datos en la Sim Card, pero si usar los que estén almacenados. Usa Micro Sim Card. Yo opté por dejar la que tenía y mandarla a recortar por los "expertos" de Sandandresito. Igual es muy fácil importar todos los contactos de un equipo a otro usando Bluetooth.
Uno de los "peros" fue el olvido de la Radio FM en el Lumia. Para ello, es necesario subir el celular a la versión "Amber", disponible con la primera actualización. Una vez instalada, aparece la Radio FM como la de cualquier dispositivo.
Contras: me parece una falla estúpida el que el Lumia no tenga niveles de volumen diferenciados entre sus "medios". En pocas palabras, el volumen del parlante es general para cualquier función, lo que es una verdadera patada en el trasero cuando se quiere reproducir música a volumen moderado, pero se quiere en simultánea conservar un alto timbre para las llamadas. Es muy frecuente que tras escuchar música o cualquier otro medio, olvide subir el volumen general y pueda no escuchar una llamada entrante.
En resumidas cuentas, siempre queda faltando el centavito para el peso (lo del volumen es una verdadera trolleada), aunque en realidad considero que el Lumia 520 está más que bueno por su precio. Su pantalla es de una definición excelente y su comportamiento al tacto resulta muy agradable, casi cercano a un iPhone.
Así las cosas, siento que con el Lumia he vuelto a revivir las virtudes y ventajas de cuando Nokia era el rey de la telefonía celular.