En efecto es el mismo motor del Spark GT, con la diferencia de que la fundición es china y no coreana. Algo interesante es que tiene cadena de repartición.
He manejado tanto N200 como N300 y en ésta última se notan mejoras en acabados e insonorización, además de que su caja es aún más corta (en primera, tercera y quinta), al punto de que (de acuerdo a unas anotaciones que hice y que tengo por ahí en el celular y se tomaron en un evento de lanzamiento) usted va en quinta a 70 km/h y el motor ya le está girando a unas 3.000 rpm.
No es el carro más preciso del mundo para manejar pero creo que esa tampoco es la idea, los recorridos para meter los cambios son algo extraños, no se sabe donde está el neutro a veces y el acelerador es bastante sensible, así que uno la primera vez termina revolucionando más de la cuenta el motor para arrancar. El freno además tiene siempre su punto "muerto" antes de empezar a actuar. Lo mejorcito sería la dirección, que está graduada para no ser muy blanda en carretera, algo muy valioso en un vehículo tan angosto en donde una maniobra delicada involuntaria podría terminar en un susto.
Es más una vancita de ciudad (me disculpan la frase obvia) porque los asientos son muy blandos y no son de los que aguantarían bien a alguien ahí sentado por varias horas, más con una posición de manejo de furgón que lo deja con las piernas bien dobladas. Un defecto que noté en visibilidad es que el espejo derecho no se podía abrir demasiado y quedaba todavía mucha chapa a la vista. De espacio atrás está bien pero como no hay un hueco debajo de los asientos de la primera fila, entonces si uno va en las sillas de la mitad, los pies se "chocan" con la pared que deja el sitio donde está guardado el motor y eso en un recorrido muy largo termina siendo incómodo porque uno no puede estirarse tanto, yo mido 1,75 y terminé con una pierna dormida por eso tras un par de horas.
Y no tengo más carreta anotada y me tengo que poner a trabajar...