Pues ojalá sea para mejorar. Llega un gringo a la dirección de la categoría y otro a la de mercadeo y ya sabemos como son los norteamericanos para armar shows. Ojalá volvamos a la igualdad y competitividad de antes y que Ross Brawn desmonte tantas ayudas tecnológicas. Además que vuelvan más pistas de las de antes, más circuitos callejeros, qué se yo. Y dejen de correr en cuanto desierto aburrido se inventan, con carros que parecen autónomos.