Identificando el precio como el argumento más fuerte para decidir la compra de un vehículo de origen chino, sobre las marcas europeas, americanas (coreanas) o japonesas que actualmente tenemos en oferta en nuestro país, y en una desprevenida comparación de precios de modelos equiparables tenemos:
Un spark 1.0 básico cuesta $20’290.000 comparado con su copia el QQ 1.1 standar con un precio de $18’490.000 la diferencia en precio es tan solo de un $1’800.000 pesos es decir un 9.73%
Un Haima 3 1.6 GLX cuesta $39’800.000 vs un mazda 3 43’990.000 con una diferencia de $4’190.000 que equivale a un 10.5%
Un Haima 7 full cuesta $53’800.000 mientras una chevrolet captiva 2.4 LS cuesta $59’990.000 diferencia de $6’190.000 un 11.50%
El precio y el diseño se han convertido en armas de mercadeo que al final no son más que un sofisma de distracción, observando estos diferenciales de precio, vs seguridad, materiales, calidad de construcción, garantía y servicio, que en algunos casos de las marcas tradicionales están incluidos dentro del precio de compra, creo que la supuesta ventaja de precio ya no es un sólido argumento de compra, más si tomamos en consideración un usado de las marcas “tradicionales” con un tiempo de uso menor de 1 año, en este caso hasta el precio estaría a favor de las marcas “tradicionales”.
Algo similar viene sucediendo con algunas marcas coreanas (por mencionar alguna ssangyong) mejoró el diseño de su korando C y lo vende a un precio igual o superior a marcas tradicionales, es válido recordar que su propulsor es licenciado por mercedes benz cuyo desarrollo data cuando menos 3 décadas atrás.
Si bien es cierto que la industria automotriz china ha avanzado rápidamente, y que sin lugar a dudas en un par de décadas serán competitivas frente a las marcas mundiales, también es cierto que aun no están a la par de las marcas tradicionales y los diferenciales de precio no son tan grandes como para tomar el riesgo de comprar un carro de origen chino con menor precio, mejor equipamiento vs menor calidad de materiales, construcción y SEGURIDAD que sus “clones” o pagar más por un vehículo de las marcas ya reconocidas en nuestro mercado, si personalmente estuviese en esa decisión preferiría un usado de las marcas “tradicionales”.