Bueno, les cuento que por aquello de que el Lancer está en el taller y no lo entregan hasta la próxima semana, unos vecinos amablemente nos prestaron su Logan para hacer unas vueltas en el aeropuerto.
Anteriormente mis impresiones en Logan eran en un Expression 1,4 de un amigo, esta vez me tocó 1,6 Expression pre-facelift con 46mil kilómetros.
Poco más que agregar a lo que se ha dicho ya, afortunadamente puedo comprarar casi que directamente con el Aveo GT Emotion que pude conducir hace unas pocas semanas durante varios kilómetros.
Lo primero es la posición de manejo, el timón es fijo y los pedales están muy arriba, entonces me tocó atrasar algo más la silla y el timón me quedaba algo lejos para mi gusto, ahí me pude acostumbrar graduando con cuidado el espaldar, los espejos retrovisores son de paciencia, muy poco campo de visión entonces toca graduarlos con cuidado para que queden en su punto. Por ser tan cuadrado requerí algo de de tiempo para acostumbrarme a la parqueada.
Las relaciones cortísimas, aprovechan a cabalidad los noventa caballos y camina muy decentemente, recupera en marchas altas mucho mejor que el Aveo y además el tacto al manejarlo me pareció más agradable, empezando por la palanca de cambios, de recorridos largos pero muy suaves, rápidos y fáciles de engranar, los frenos muy esponjosos al principio del recorrido, la dirección ya tenía cierta vibración a partir de 120, me imagino que por kilometraje ya hacía falta una balanceada, la asistencia ni muy dura ni muy blanda, correcta en ese aspecto, eso sí, algo lenta en cuanto a vueltas.
Con respecto al coreano, en altas revoluciones ya se notan los caballitos menos, pero en la mayoría de situaciones en nuestras montañosas carreteras veo que el Logan por las logradas relaciones tan cortas lleva la ventaja, seguramente tendrá menos velocidad máxima.
La austeridad del carro sale a relucir en lo ruidoso, no está aislado de casi ningún sonido mecánico, la ergonomía, como bien sabrán, no es la mejor, los mandos del aire quedan muy lejos y toca quitar mucho la vista de la vía, los bolsillos de las puertas delanteras compensan la ausencia de compartimientos en la consola central, mucho espacio para los pasajeros sin muchas gabeticas. En esta unidad no percibí ningún ruido de desajuste, si acaso el pedal de freno chillaba por algo de falta de lubricación. Algo muy raro fue que espotáneamente por la 26 me dejó de funcionar la direccional derecha, después se volvió a prender el carro y funcionaba como si nada.
La suspensión blanda, se mueve más de lo que me gustaría al pasar rapidito por una que otra ondulación o hueco de tantos que hay en la Boyacá antes de Colina, eso sí, uno no sufre en ninguno, se nota que debe ser muy trochero.
Y no repito más, manteniendo la conclusión de que me parece la alternativa de entrada familiar más sensata por equilibrio entre desempeño, espacio, calidad y equipamiento en el caso del Dynamique, y hasta me divirtió a ratos pues la caja permite "juguetear" mucho en ciudad.
Saludos..............