Esa época no fue la mejor para algunas marcas europeas en algunos segmentos, trataron de reinventar el carro con experimentos raros como el Avantime o el VelSatis, y el que dio buenos resultados -en ventas- fue el Mégane, mientras tanto Peugeot no tenía los mejores resultados de confiabilidad con los 307 y Fiat no estaba muy lejos con el Stilo mientras que el extraño Croma y los Lancia no se vendían ni en Europa, ídem para Seat con el Toledo III.
Y mientras ocurría este desastre, muchos españoles se dedicaban a criticar porque a sus Golf/León se les caían las ventanillas solas y rompían sensores de oxígeno a cada rato en los motores Diesel, afortunados ellos que no les tocó experimentar como a muchos coterráneos con el principio de la vida comercial del Laguna II o del Mégane/Scénic II, el 307 o el Stilo.
Citroën, mientras tanto, pasaba sin pena ni gloria con el Xsara y el C5, aunque el C3 no resultó ser la gran maravilla, y la sacó del estadio con la gama C4, a la larga son los que mejor han sabido sobrevivir a una época no muy buena, pero que nunca llegó a ser tan mala como la hecatombe de General Motors y Chrysler.
Saludos.........