A ver, vamos a desenredar esta película con sus protagonistas y sus papeles según lo que yo he entendido:
SkodaHaus Medellín: Es el malo del paseo, pues se dedicó a tomar correctivos livianos con la esperanza de no incurrir en muchos gastos y, por ende, no perder tiempo y dinero con ese "chicharrón", a todas luces una pésima práctica del "menor esfuerzo" que, como siempre pasa, terminó volviéndose en contra de ellos y les salió "mas caro "el caldo que los huevos". Tienen la responsabilidad en primer grado de entregar el carro sin una sola falla por ese concepto y sin escatimar gastos...el daño a la imagen de la marca cuesta mucho más que un carro entero.
-Familia Mora: Naturalmente se sienten ultrajados por la pésima solución dada por Skoda Haus y toda la manipulación durante 7 meses con salidas pendejas y totalmente risibles. Entiendo su justificado disgusto, pero si el problema ya está solucionado, tiene garantía y no habrá más fallos, deben recibir su carro y disfrutarlo para olvidar el enojoso impase. No es posible un cambio de unidad, pues el carro se pudo arreglar (incluso desde el principio, pero bueno...).
Vas Colombia: Llegó de último al tema, pues se enteró cuando ya la queja hizo eco más allá del concesionario y ha tomado los correctivos y hecho las propuestas que le corresponden. VAS es el importador y distribuidor, pero la atención queda en manos del concesionario, a no ser que el concesionario sea directamente de VAS y si así fuere, existiría una garrafal falla de comunicación entre Medellín y la sede central para enterarse de este caso a tiempo.
Por ultimo, a la familia Mora la asiste todo el derecho de demandar, lo cual no significa automáticamente que tal petición tendrá exito en su favor. Es un recurso para lograr una reparación económica y moral según lo estimen sus pretensiones o los profesionales en derecho que los asesoren. Ya la justicia lo dirá...
Estoy de acuerdo con las quejas sobre la poca atención o protección que tengan los consumidores frente a un concesionario que a todas luces fue negligente con una falla y le causó un enorme daño a la marca en el país, pues, según el mercadeo de "Coquito", un rumor puede hasta acabar con el más robusto imperio comercial (casos se han visto)
Ojalá se logre llegar a un acuerdo sin necesidad de recurrir a estrados judiciales y sobre todo, que VAS Colombia tome los correctivos consecuentes con los concesionarios, que si bien pueden no ser de su propiedad, existe una relación comercial que deben honrar en bien de la marca que cada uno representa a su manera, pero, sobre todo,para evitarle estos sinsabores a los consumidores finales quienes finalmente son el mejor vehículo publicitario de los productos que ofrecen