¿Recuerdan que les conté que dejé apartado el seguro de la guaya del capó del carro la semana pasada?
Pues bien, hoy fui a hacerlo instalar y aquí les presento algunas fotos que tomé mientras tanto.
Debo empezar por contarles que la persona que lo fabricó ingenió un nuevo sistema pues según me dijo la instalación de la funda para la guaya era más compleja, obligaba desarmar la chapa y en ocasiones la cosa no quedaba del todo bien. Además porque no era tan segura. Resulta que ahora lo que hacen es que remachan dos platinas para que no haya forma de meter la mano...
Aquí las fotos:
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Estas son las dos piezas de las que se compone el seguro.
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Esta es una pieza plástica que cubre la parte frontal de la chapa. Se suelta fácilmente halando. No se vuelve a usar.
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Instalando la primera platina. Es la más importante pues cubre el hueco por donde se mete la mano para halar la guaya.
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Así se ve el hueco una vez instalada. La única forma de sobrepasar la placa sería metiendo la mano bajo la defensa pero el espacio entre esta y el radiador es mínimo... además.. si el auto victima acaba de apagarse, la quemada debe ser violenta.
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Placa dos. Cubre el frente de la chapa de manera que tampoco se pueda halar la guaya o cortarla. Supongo que sin este sería relativamente fácil cortarla con un cortafrios o con una cizalla pequeña.
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Instalada.
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Vista frontal.
Pues a mi la verdad me convence pero esto plenamente convencido que hacer esfuerzos para no dar papaya son lo mejor. Quedé en ir la otra semana a remachar los lamevidrios y los cauchos del techo... estos últimos me dijeron ahora no se remachan sino que se pegan por debajo con un pegante Sika. Tomaré las corrrespondientes fotos.