Hoy abrí la cuenta en Davivienda, dejándome llevar por la buena atención que me ofrecieron, poco papeleo y plataforma para para pagos PSE a bajo costo integrada. Vamos a ver que tal con los días y les cuento.
Sobre los bancos ya he probado varios, Grupo AVAL en especial Occidente y Bogotá, malas experiencias, lentos, poco asertivos para tratar al cliente, mala banca virtual y no me ofrecieron nada bueno en varios años de uso, (Bancolombia exagera ofreciendo cosas, pero prefiero eso).
Banco Agrario fue solo por necesidad, mucho papeleo, pocas oficinas.
Colmena y su fusión con Caja Social lo tuve por nomina, no me atrajo nada del banco.
Los otros no los conozco, Av Villas y BBVA, por lo que veo he pasado por muchos, la verdad sin querer y por sola necesidad comercial.
Sobre lo llenos que son los cajeros en fechas de pagos, siempre he tenido una filosofía, guardar algo de dinero y sacar cuando no hay gente. Así lo he aplicado, tanto antes que ganaba un sueldo paupérrimo, como ahora que soy emprendedor y me toca buscar el pan de cada día. Puede sonar al elitista, pero esas filas me hacen pensar en la pobreza de las personas (en el sentido de la poca educación financiera) que se gastan hasta el último peso y no guardan nada para los días venideros. Mejor es administrar bien y pasar por el cajero uno o dos días después.
Sobre los bancos ya he probado varios, Grupo AVAL en especial Occidente y Bogotá, malas experiencias, lentos, poco asertivos para tratar al cliente, mala banca virtual y no me ofrecieron nada bueno en varios años de uso, (Bancolombia exagera ofreciendo cosas, pero prefiero eso).
Banco Agrario fue solo por necesidad, mucho papeleo, pocas oficinas.
Colmena y su fusión con Caja Social lo tuve por nomina, no me atrajo nada del banco.
Los otros no los conozco, Av Villas y BBVA, por lo que veo he pasado por muchos, la verdad sin querer y por sola necesidad comercial.
Sobre lo llenos que son los cajeros en fechas de pagos, siempre he tenido una filosofía, guardar algo de dinero y sacar cuando no hay gente. Así lo he aplicado, tanto antes que ganaba un sueldo paupérrimo, como ahora que soy emprendedor y me toca buscar el pan de cada día. Puede sonar al elitista, pero esas filas me hacen pensar en la pobreza de las personas (en el sentido de la poca educación financiera) que se gastan hasta el último peso y no guardan nada para los días venideros. Mejor es administrar bien y pasar por el cajero uno o dos días después.