Ventas de vehículos siguen a la baja
María Paula Albán Ramírez
La caída del sector automotor preocupa a los empresarios del segmento, a pesar de que los resultados de los primeros meses del año están en línea con las proyecciones totales que apuntan a la comercilización de 180.000 unidades en 2009.
Así quedó registrado en la mesa sectorial correspondiente a esta actividad, realizada con la presencia del Superintendente de Sociedades, Hernando Ruiz López y representantes del sector y de LA REPUBLICA.
La industria automotriz en Colombia continúa siendo uno de los rubros más importantes de la economía nacional ya que representa 5,25 por ciento del PIB.
Así mismo, en lo relacionado con el empleo, esta industria concentra cuatro millones 300 mil trabajadores y debido a la baja en las ventas, en el último año se han perdido cerca de 350.000 empleos, lo que representaría tres puntos de la tasa total de desempleo del país.
Según Tulio Zuloaga, presidente de Asopartes, el segmento tuvo un desarrollo positivo desde 2003, luego de seis años de pérdidas, lo que significó la recuperación de la industria después de la desaceleración de 1998.
A partir de ese año, la venta de automotores registró cifras positivas y se obtuvo un crecimiento en los ingresos operacionales desde 11 billones de pesos en 2005, hasta alcanzar un pico en 2007, con ganancias por 19 billones de pesos. Esta situación fue generada por la caída en el precio del dólar, lo que facilitó la compra de vehículos importados de alta gama, impulsando al alza las cifras.
Sin embargo, en 2008 el dólar volvió a sus niveles habituales, razón por la cual se experimentó una caída de 13,4 por ciento en las ventas y un decrecimiento de 12,12 por ciento en las utilidades, con 17 billones de pesos, es decir los mismo niveles de 2006.
Se espera que las cifras del sector continúen a la baja a lo largo de este año. De hecho, para finales de 2009 se proyecta la venta de 180.000 vehículos y hasta marzo esta expectativa se cumplía, teniendo en cuenta el crecimiento de las ventas en el segmento de gama alta.
Las restricciones del mercado venezolano han sido determinantes para la caída en la enajenación de automóviles. En efecto, de los 42.000 vehículos que se comercializaron a ese país en 2006, en 2008 descendió a 22.500 unidades y según las últimas negociaciones con el presidente Hugo Chavéz, para 2009, Colombia contará con 10.000 cupos de entrada a ese mercado. De esta forma, el sector ha visto caer 55 por ciento las cifras de exportaciones a Venezuela y 34 por ciento a Ecuador, dos de los principales clientes de la industria.
Según Zuloaga, los difíciles momentos que vive el segmento han sido reforzados por factores como el contrabando, que representó pérdidas por 2.260 millones de dólares; el mercado ilegal que quitó 660 millones de dólares, y el hurto de vehículos, cuyos niveles siguen altos.
A juicio del ejecutivo, el mercado automotor representa 7.000 millones de dólares y en la actualidad, la comercialización ilegal tiene casi 50 por ciento de éste, razón por la cual aún hay para donde crecer, si se adoptan las medidas correspondientes.
De hecho, se espera reglamentar la entrada de autopartes por determinados puertos, donde se implementarán escáneres con capacidad para revisar 17 contenedores por hora en ciento por ciento de su capacidad.
Hoy la revisión se efectúa manual y aleatoriamente, por lo que sólo se revisa 15 por ciento de las cargas, lo que facilita el ingreso de estos productos. Este elemento, sumado a la corrupción, afecta el comercio del sector.
Datos
El Pico y Placa en Bogotá ha afectado el comercio de autopartes. La venta de llantas es la más perjudicada, ya que con una movilización normal, un vehículo necesitaría cambio de llantas una vez cada dos años, pero con esta medida, los cambios serán necesarios cada dos años y siete meses.
El total del parque automotor que circula por las vías del país, 3.150.000 unidades, además de 2 millones de motos. El gremio considera que el mercado crecerá hasta el año 2020, pero que después de esa fecha, el mercado se estancará y de esta manera, se beneficará el comercio de las autopartes en el país.
Por lo menos 20.000 negocios de autopartes funcionan en Colombia, principalmente pequeñas empresas, de las cuales, se calcula que 50 por ciento de ellas están ubicados en la ciudad de Bogotá. De hecho, 1.500 negocios están localizados en el sector del Siete de Agosto y 860 en la zona de la Estanzuela, en los Mártires.
El gobierno, a través de los créditos de Bancóldex destinó 150.000 millones de pesos para la compra de vehículos nuevos. Sin embargo, el gremio afirma que esta ayuda no ha producido resultados, debido a la estabilidad de la banca en Colombia, que ha llevado a que éstos utilicen sus propios recursos.
Ingresos suman 17,2 billones de pesos
Andrea Mancera
Bogotá. La dinámica de la actividad comercial del sector automotor se reflejó en el resultado de sus ingresos operacionales durante 2006 y 2007, con un crecimiento de 21%, mientras que 2008 registró un descenso de 12,1% al situarse en $17,2 billones.
Este resultado corresponde a un estudio de la Superintendencia de Sociedades que involucra una muestra homogénea de 593 firmas. Así mismo, se incluyen 858 empresas del sector que reportaron sólo en 2008.
Según la analista de la entidad, María Teresa Camacho Ríos, se aprecia una disminución de 36,78 por ciento en la utilidad neta de 2008, con 519.353 millones de pesos. Sin embargo, frente a los ingresos sólo representa 3,02 por ciento.
El total de activos del sector ha presentado un crecimiento de 10 por ciento. Este rubro se encuentra concentrado, principalmente, en los inventarios y deudores, indicadores que representan la operación de estas compañías, pues en ellos se registran los automóviles y motos para la venta y los compromisos adquiridos por los deudores en la compra de los mismos.
El pasivo a 31 de diciembre de 2008 ascendió a 5,7 billones de pesos, equivalente a 60,84 por ciento del valor de los activos, porcentaje que determina el nivel de endeudamiento del sector. El patrimonio ascendió a 3,6 billones de pesos al finalizar el año y creció 8,9 por ciento, comparado con 2007.
Los indicadores de rentabilidad fueron positivos de 2005 a 2007, mientras que el año pasado mostraron reducción de dos puntos. El endeudamiento del sector se ha mantenido entre 60 por ciento y 62 por ciento en este periodo, concentrándose en el corto plazo y principalmente con la banca.
En cuanto al empleo, se evidenció una caída de 17,18 por ciento en 2008, con 39.040 personas ocupadas en este oficio.
El comercio de vehículos nuevos en 2008 presentó operaciones por 13 billones de pesos, mostrando una caída de 15,47 por ciento, frente a 16 billones de pesos vendidos el año inmediatamente anterior. En cuanto a la situación ante la Superintendencia, se denota que 98,72 por ciento de las sociedades del sector presentan una situación de actividad frente al desarrollo de su objeto social, pues 847 empresas informaron encontrarse activas y 1,28 por ciento reportó haber adelantado alguna medida ante la insolvencia.
Compañías de Bogotá, las de mayor aporte
Aunque las medianas empresas del sector participan con 34,97 por ciento de la muestra, las pequeñas con 45,92 por ciento, la gran empresa con 14 por ciento y la micro con cinco por ciento, son las grandes compañías las de mayor aporte al volumen de ingresos con 77,13 por ciento, por un monto de 14,6 billones de pesos.
Estas firmas, además reportaron utilidades brutas, operacionales y netas por 2,6 billones de pesos, 829.040 millones de pesos y 491.750 millones de pesos, respectivamente. Las firmas que desarrollan su actividad en Bogotá representan 45 por ciento.
Industria redujo seis por ciento su dinámica
Andrea Mancera
Bogotá. Para el gremio, las cifras del comercio de vehículos no son las mejores: sin embargo, se plantea el hecho de cargar con unas ventas significativas registradas en 2007.
Según el presidente de Asopartes, Tulio Zuluaga, el sector participa con 5,25 por ciento del PIB y 35 por ciento de los impuestos de grandes municipios son generados por esta industria. En el primer trimestre del año en curso, la industria en Bogotá ha descendido 15 por ciento, en gran medida por el Pico y Placa y cinco por ciento en el resto del país.
En 2008 se registró un descenso en las operaciones de seis por ciento con 3.970 millones de dólares, comparado con 2007 cuando la dinámica de este segmento permitió la comercialización por 4.150 millones de dólares.
Los empleos directos, indirectos y colaterales generados por la industria ascienden a cuatro millones 300 mil, que corresponden a 23 por ciento de la fuerza laboral y 10 por ciento de la población colombiana.
Para Zuluaga, es importante resaltar el desarrollo del sector desde 1997 cuando registró un pico de ventas de 150 mil unidades, situación que se creía no se volvería a presentar.
El bajo dinamismo se vislumbró hasta 2003, época en la cual comenzaron a recuperarse las operaciones con 93 mil automotores, en 2004 llegaron a 114 mil, en 2005 se ubicaron en 146 mil, mientras que en 2006 se vendieron 201 mil automóviles y en 2007 laa cifra llegó a 253 mil automotores.
El registro del año pasado correspondió a 219 mil vehículos y la proyección para 2009 se ubica en 180 mil carros.
En lo corrido del año hasta abril, se han comercializado en el mercado casi 60 mil unidades, lo que señala buenas posibilidades para cumplir los objetivos. “En Colombia se encuentran rodando tres millones 150 mil vehículos, por lo tanto, aún existen grandes posibilidades de acoger consumidores”, dijo Zuluaga.
Sin embargo, el gremio dijo que debido a las dificultades en los créditos bancarios, ha afectado la industria, pues 70 por ciento de la comercialización de estos bienes se realiza de esta manera.
Según Zuloaga, una de las estrategias para mitigar los flagelos del contrabando, de las ventas de autopartes de segunda y los hurtos, es el planteamiento al Gobierno Nacional sobre la vigilancia y control del ingreso de la mercancía al territorio nacional.
El directivo dijo que se busca que se regule esta operación sólo en Cúcuta, Buenaventura, Cartagena, Barranquilla, Ipiales y Medellín.